martes, 23 de julio de 2013

Opresión

¿Os acordáis de las manifestaciones antiglobalización? Hubo una en Barcelona, alrededor del año 2001. Por aquel tiempo yo tenía un amigo asturiano que fue expresamente a aquella manifestación. De allí volvió con una camiseta que, alrededor del lema "Pobles en llucha per la seva llibertat" (cito de memoria) tenía un círculo de banderas que representaban, en versión nacionalista o independentista (si no es lo mismo), a todas las comunidades autónomas. Excepto Murcia, creo. 

Para Cataluña tenía esta: 


Que viene a representar a los Países Catalanes. Tuve qué preguntar de quién era esta: 


Que es el lábaro cántabro. Sí, nacionalistas cántabros. Me llamó la atención en su momento que había una bandera que coincidía con la autonómica: 


Total, que entre unas y otras, venían a reclamar independencia, o autodeterminación, o autogobierno, o lo que sea, a toda España, pero por partes. Así que a mí no me cuadraba, porque si todos son pueblos oprimidos, ¿quién el el pueblo opresor? Con este planteamiento no queda una España opresora
No había vuelto a pensar en esto hasta que ayer me metí sin que me invitaran en una conversación en twitter, que para eso está. Hablando de nacionalismos, @EnderRap dijo esto: 


Entonces, si no he entendido mal, el nacionalismo español es cosa del Estado central y de la gente que niega el derecho a decidir de los pueblos. O sea, que no hay un pueblo español opresor, ¿no? es "gente" que pertenece a los pueblos oprimidos. Pero si son oprimidos, ¿cómo pueden ser a la vez opresores?

Se me ocurre que quizá alguien se está haciendo un lío. Que no se trata de pueblos. Que se trata, a falta de una palabra mejor, de clases. Que no es que España nos robe, que quien nos roba son algunos españoles, algunos de los cuales son de los nuestros. Y que es a ellos a los que beneficia que pensemos que el enemigo, el opresor, el ladrón, es otro, alguien externo.